25 oct 2011

Cajones


Aquel día, que corriste a esconderte,
Te guarde en un cajón
Junto con mis letras…
Enredé mis palabras a tu cuello,
Ese cuello que nunca pude morder
Con la luna de media noche,
Y te puse en un rincón
Callado…quieto…

Guarde ese cajón con llave
Y no lo mire más…
Quería hacerlo chiquito
Insignificante…
Para que no dolieras,
Guarde una parte de mí contigo
Para que no sintieras soledad,
Nunca quise te sintieras solo…
Aunque no lo necesitaras.

Me guarde hay contigo
Como si mis soledades de alguna manera
Negaran las tuyas…
Al menos las que te invente…
Lo hacia así mas fácil..

Aquel día que ahora recuerdo
Como si lo iluminara una luz
Violeta por detrás
Perdí algo de mí…
Algo que te regale sin que lo pidieras…
A ti y a nadie mas…
Olvide el olor de la canela
Y el sabor de los dedales.

Me invadió un frío insoportable,
Tiemblo, incontrolablemente
Todas las noches tiemblo de frío,
En los muslos, en los ojos.
Un frío que hace el tiempo pasar
Diferente, como delgadas hojas de hielo
Cuarteándose lentamente, reventando
Como burbujas de cristal…
Un frío que ni todos mis conjuros
Han podido borrar…

Hoy que abro ese cajón,
Por inercia o por fatalidad,
No te encuentro,
Ni siquiera un cadáver de ti
Ahorcado por mis palabras
Ni me encuentro a mí…
Ni siquiera una sombra de mí
Perdida entre tanto polvo

Veo algo diferente…
Algo que brilla con luz propia
Que si miras muy de cerca no puedes decir
Si es humo o velas,
Inciensos o espigas…

No puedes decidir
Si brilla de locura
O de sinceridad,
Si se burla de ti
O te pide ayuda…

No hay comentarios:

Publicar un comentario